El 12 de Febrero asistimos a una exposición en la sala Enlatamus, si la visitastéis comprobariais lo impactante que resultaba. En la oscuridad de la sala, avanzamos por un pasillo; conforme nuestros ojos se acostumbraron a la oscuridad distinguíamos que a lo largo del camino de sal unos árboles de luz nos iluminaban hasta el final. Allí una cabeza fantástica de sal se multiplicaba por el efecto de varios espejos. ¡Genial!
Trás esta visita, el autor se comprometió con nuestra escuela a venir y enseñarnos a trabajar con la sal. Este elemento tan propio de nuestra localidad no sólo sirve como condimento o protección anti-hielos.... Con ella también se puede hacer arte o incluso una lámpara que es la manualidad que hemos realizado durante el taller celebrado hoy 22 de febrero.
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