EXPERIMENTO 3: 1 de abril

        CÓMO HACER SLIME CASERO PARA NIÑOS

OPCIÓN A:

Necesitamos:

2 recipientes de plástico
150 ml de agua
Tres cucharadas de detergente líquido
Cola blanca
Colorante comestible
Cucharita

Procedimiento:

Paso 1: colocar en uno de los recipientes dos cucharaditas de cola blanca. Agregar tres gotitas de colorante comestible y mezclar todo hasta que se vea uniforme. Para un color más intenso, agregar colorante.

Paso 2: en otro recipiente agregar dos cucharadas de detergente y una de agua y remover hasta que se mezclen.

Paso 3: juntar las dos mezclas y remover hasta que se forme una masa uniforme. Amasar con las manos hasta que tome mejor consistencia.

OPCIÓN B:

Materiales:

Espuma de afeitar

Cola blanca

Líquido de lentillas

Colorante alimentario

Recipiente

Cuchara grande

Procedimiento:

Comienza echando 1 taza de pegamento a tu recipiente.

A continuación, añade la espuma de afeitar. Para esto, no hay una cantidad fija: cuanto más espuma agregues, más pesado será el slime.

Con una cuchara grande, mezcla el pegamento y la espuma de afeitar.

Una vez tengas bien mezclados ambos, añadir el colorante y mezclar.

Mezcla bien hasta que el colorante se haya integrado por completo a la mezcla y ahora, añade el líquido de lentillas, poco a poco.

Continúa mezclando y ves echando el líquido de lentillas hasta que obtengas la textura que te gusta. A medida que vayas mezclando puede que te canses de usar la cuchara de modo que puedes usar también tus manos.

¡Listo! Ya has hecho slime casero con espuma de afeitar. Cuando quieras guardarlo, bastará con colocarlo en una caja de plástico o recipiente  y dejarlo en un lugar en el que se pueda conservar a temperatura ambiente sin problema. Nunca lo dejes tapado del todo o en el exterior ya que lo más seguro es que en pocos días el slime se acabe secando y ya no puedas volver a usarlo.